Estuve sentada en la cama por un rato cuando me di cuenta de lo mucho que puedo perder. No sé exactamente que es lo que más me aterra pero ahora sé que hay algo que lo hace. Hay mucho ruido en mi cabeza que cuando es hora de dormir, todo eso se transforma en voces que comienzan a gritar. Las ignoro, pero eso no es suficiente para que se marchen. Sé que habrá algún momento en el que todo eso pase, pero por ahora sólo es aguantar, y cuando todo vuelva a la normalidad podré calmar todo aquello que ahora no cesa.