Confusión e incertidumbre era todo lo que había podido sentir estos últimos meses, el tener días buenos y el tener días malos dentro de todo el encierro me consumía, y esto me hizo pasar uno de los tiempos más difíciles pero al mismo tiempo más valiosos que es encontrarme a mi misma, el saber apreciar mi compañía y entender que está bien estar sola, está bien estar acompañada. La clave es pensar en mí, y que eso es lo que vale.